¿Los seguros de decesos tienen periodo de carencia?

Cuando contratas un seguro debemos considerar que no todas las coberturas contratadas están disponibles de inmediato y en el seguro de decesos no es la excepción. A esta situación se le conoce como periodo de carencia, pero ¿en qué consiste? ¿Cómo puede afectar? ¿Sabías que la mayoría de las aseguradoras tienen esta cláusula en sus contratos? Te resolvemos todas las dudas a continuación.

¿Qué es el periodo de carencia?

La carencia en el seguro de decesos es el tiempo que transcurre entre la entrada en vigor de la póliza o fecha de efecto y el momento en el que todas las coberturas de la póliza se encuentran activas.

El periodo de carencia en un seguro de decesos puede afectar a todas o parte de las coberturas de la póliza. Si durante el periodo de carencia sucede una contingencia contemplada en la cobertura que lo aplica, esta cobertura no se aplicará.

¿Cuál es el periodo de carencia en los seguros de decesos?

Este periodo es diferente según la compañía y el tipo de seguro contratado. Por lo general, el periodo de carencia puede oscilar entre los 20 días y los 12 meses, respectivamente, (excepto recién nacidos).

Es importante mencionar que el período de carencia del seguro de decesos no afecta a todas las coberturas por igual, incluso es posible que algunas tengan y otras no. Lo mejor es consultarlo directamente con la compañía de seguros y en la póliza contratada.

Estas pólizas pueden tener un periodo de carencia en el que el fallecimiento no está cubierto a no ser que se produzca como consecuencia de un accidente. Además, las garantías de los seguros de decesos no suelen comprender los fallecimientos producidos por catástrofes naturales, energía nuclear o radiaciones radioactivas, acciones bélicas, actos terroristas o disturbios. En cuanto a los hechos causados voluntariamente por el asegurado, algunas aseguradoras los excluyen, mientras que otras les aplican una carencia de más de un año.

¿Por qué las aseguradoras establecen periodos de carencia?

El plazo de carencia es una herramienta de la que disponen la mayoría de las compañías de seguros, una cláusula a favor de la aseguradora para evitar que la parte contratante haga un seguro exclusivamente para resolver un problema puntual del que es consciente con anterioridad a la contratación de la póliza (una operación, dar a luz, etc) y, una vez solventado, solicite la baja del servicio.

Los tipos de seguros más comunes que conllevan un periodo de carencia son los seguros de salud, seguros de decesos y seguros de vida.

Recuerda que el periodo de carencia puede variar en función de la compañía y los servicios contratados, pero lo más importante es conocer su funcionamiento. Para ello, lo mejor es revisar bien todos los puntos del contrato y preguntar todas las dudas que te puedan surgir.

¿Se puede eliminar el periodo de carencia en el seguro de decesos?

Hay compañías que eliminan el periodo de carencia, es decir, que puedes disponer de sus servicios desde el primer día. Esto solo será posible en caso de que hayas hecho “un traspaso” de ese seguro de una compañía a otra, presentando la correspondiente documentación que justificará el cambio de aseguradora.

Contratar el mejor seguro de decesos

Los seguros de decesos cada vez son más contratados. Muchas personas optan por contratar un seguro de vida por la preocupación de dejar cargas a los familiares una vez fallecido, pero también un seguro de decesos para evitarles el mal trago de hacer frente a la organización y los gastos del sepelio.

En definitiva, las coberturas originales y las sucesivas ampliaciones de los servicios que ofrecen los seguros de decesos hacen de estos una alternativa a tener en cuenta. Es por eso que desde Segurfer te ayudamos a encontrar el mejor seguro de decesos para afrontar los momentos más difíciles.

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